La importancia de la iluminación en el PLV

stands y puntos de venta

En post anteriores repasamos algunas de las opciones que ponemos a disposición de nuestra clientela para iluminar sus stands y puntos de venta. Soluciones tan punteras como nuestra lightbox. La cuestión es, ¿eres 100% consciente de la importancia que tiene contar con una buena iluminación? 

Hablamos de algo clave para atraer la atención de las personas (consumidores en potencia al fin y al cabo) hacia los elementos publicitarios. ¿Cómo lograr una publicidad lumínica efectiva? Como punto de partida, no olvidando que la luz es clave para nuestra percepción del entorno. La iluminación es capaz de cambiar la forma de ver un espacio. Hará que nos impacte más o menos y que un mensaje cale más en el consumidor potencial. 

Siempre resultará más impactante cualquier clase de publicidad lumínica que los carteles no luminosos. La iluminación LED es la más utilizada porque, entre otras razones, consume menos energía. Los tótems de LED sirven tanto para interior como para exterior. En definitiva, las instalaciones publicitarias retroiluminadas son ideales para llamar la atención de día y de noche.

La luz en los stands y puntos de venta 

De forma natural e innata, las personas nos “desactivamos” y relajamos cuando estamos en ambientes con poca luz. En cambio, en ambientes con altos niveles de luz nos activamos. Esta es la base sobre la que trabaja el llamado Visual Merchandising. Aprovecha nuestra reacción natural a los efectos de la luz para diseñar entornos publicitarios y captar la atención del público.

¿Cómo se utiliza el diseño de iluminación en el Visual Merchandising? Por ejemplo, en un supermercado, las áreas de lácteos o congelados están más iluminadas y además la luz suele ser fría. En cambio, en las zonas de vinos los niveles de luz disminuyen. Vemos por ejemplo luces cálidas sobre los productos y se crea una atmósfera envolvente.

La luz activa y desactiva, provoca distintos tiempos de permanencia en cada lugar. Si en las tiendas hubiera los mismos niveles de iluminación en todo el recorrido, el ritmo de compra sería monótono y aburrido.

Por otro lado, los niveles de iluminación pueden ser generales o puntuales. Según la distribución de las luminarias, puede ser general o localizada. En función de hacia donde esté dirigida será directa, semidirecta, indirecta o semi- indirecta.

Los niveles se miden en lumens. Son la cantidad de luz que emite una lámpara en un metro cuadrado. Por su parte, los lux definen la cantidad de luz que recibe una superficie y los watts se refieren a la energía que consume cada lámpara.

Por último, se recomienda usar tecnología LED por su bajo consumo y su alto rendimiento. Podemos alternar la luz cálida con la fría. Hay que tener en cuenta además el índice de rendimiento del color (IRC) para que la luz no cambie demasiado los colores de los productos en los stands y puntos de venta..